Mel Gibson, en su faceta como director, ha alcanzado el primer puesto en la taquilla estadounidense con su más reciente película, "Amenaza en el aire", un thriller que sigue la trama de un avión secuestrado por un delincuente interpretado por Mark Wahlberg. Conocida en su versión original como "Flight Risk", la película ha sido duramente criticada por la prensa woke, que ha hecho eco de la asociación de Gibson con el presidente electo Donald Trump en las semanas recientes. El australiano ha sido, además, nombrado embajador de Hollywood en el extranjero, lo que ha intensificado el fastidio y oposición de parte de la comunidad demócrata en la meca del cine.
A pesar de las críticas, el thriller ha logrado posicionarse en el número uno de la taquilla durante su semana de estreno, superando las expectativas del estudio. Aunque 12 millones de dólares en su primer fin de semana pueden parecer una cifra modesta, se considera adecuada dada la competencia presente en enero y el presupuesto relativamente limitado de la película, que ronda los 20 millones de dólares.
Con este éxito, Gibson pone fin a un periodo de ausencia de los primeros puestos en taquilla desde su película "Apocalypto" en 2006. Ahora, sus miras están puestas en la secuela de "La Pasión de Cristo", que se centrará en la resurrección y tiene como objetivo un estreno el próximo año. Además, está trabajando en una secuela de "Arma Mortal", la cual protagonizará y dirigirá.
Gibson ha captado la atención mediática recientemente debido a su polémica entrevista con Joe Rogan, donde emitió críticas al gobierno de California por su mala gestión de los devastadores incendios que han afectado al estado, en los que él mismo ha perdido su casa y propiedades.
Pero se ha consolidado, también, como un referente no-woke en la industria del cine americano, destacándose por su defensa de valores cristianos y su rechazo a las corrientes ideológicas contemporáneas que predominan en Hollywood. A través de filmes como "La Pasión de Cristo" y su inminente secuela sobre la Resurrección, la recordada Apocalypto, que describe la maldad de las prácticas del Imperio Azteca, o “Hasta el último hombre” donde narra la historia real de un soldado que salvó muchas vidas en combate; todas ellas donde Gibson explora temas profundos relacionados con la fe y los valores, el sacrificio o el heroísmo, presentando narrativas que se centran en la dignidad humana y la moralidad tradicional, y muy alejadas de los contenidos ideológicos que imperan en Los Ángeles.
Su enfoque cinematográfico no solo resuena con audiencias que buscan un cine auténtico y significativo, sino que también desafía la hipersexualización y la desvalorización del ser humano que a menudo caracterizan el cine mainstream actual. El interés de la sociedad por algo diferente va notándose más y mas, también en la industria del entretenimiento. Y la taquilla lo demuestra…
Mel Gibson: #1 en la Taquilla de EEUU en enero 2025