De $800.000 a $1.300.000 desde julio
En medio del conflicto salarial que atraviesa el sector, las autoridades del Hospital Garrahan anunciaron este lunes un aumento superior al 60% para los médicos residentes. A partir del 1° de julio, sus ingresos pasarán de aproximadamente $800.000 a $1.300.000.
La medida, que inicialmente iba a comunicarse el viernes, fue postergada y finalmente difundida desde el propio centro de salud. Según indicaron fuentes oficiales, la decisión ya formaba parte de la planificación presupuestaria del hospital.
Argumentan eficiencia en la gestión y eliminación de irregularidades
Según el comunicado difundido por el hospital, el aumento fue posible gracias a una serie de ajustes administrativos:
“Gracias al ahorro estimado como resultado de la reducción de personal fantasma y la eliminación de desvíos presupuestarios, se otorgará este aumento a los residentes”, señalaron.
Además, destacaron la implementación de un nuevo sistema de control de asistencia biométrico, que entrará en vigor el 1° de junio. Con él, afirmaron: “El Garrahan no será más un refugio de ñoquis. Quien no se presente a trabajar, será despedido”.
“Esta gestión premia el esfuerzo, no la militancia”
El texto oficial también apunta con dureza a los sectores que impulsan medidas de fuerza, a quienes atribuyen vínculos con “la militancia kirchnerista que se esconde detrás de los médicos”. La gestión, insistieron, se basa en el mérito y la responsabilidad:
“El que cumple, cobra más. El que no cumple, queda afuera”.
Resaltaron que cada peso del presupuesto de la planilla debe ir “al servicio de quienes trabajan, no de los que parasitan el sistema”, y que el foco está puesto en “la salud de los chicos”.
Proceso de reordenamiento y respaldo al Gobierno
En un comunicado titulado “Orden, mérito y salud, así se fortalece el Hospital Garrahan”, las autoridades hicieron una fuerte defensa del Gobierno nacional y su plan de reforma estructural. Mencionaron que el hospital está en “una transformación profunda”, siguiendo la línea trazada por el presidente Javier Milei.
Criticaron el uso de hospitales públicos como espacios de militancia y cargos innecesarios durante años, y afirmaron que el Garrahan avanza hacia un modelo eficiente, con más camas, mejor infraestructura y nuevas auditorías.
Prioridad: la salud infantil
El país atraviesa múltiples crisis, pero la atención hospitalaria de alta complejidad, especialmente la de los niños, es una prioridad incuestionable. Según las autoridades, el nuevo rumbo busca garantizar que los recursos del Estado estén bien destinados y que el esfuerzo médico sea justamente reconocido.
La sociedad espera que la calidad en la atención médica sea un reflejo en los hospitales del país, también por las mejores condiciones de los profesionales de la salud, que día a día dan muestra con su esfuerzo y su profesionalismo, nos cuidan.