La leyenda del teniente Bedacarratz se ha forjado en el imaginario popular de Macachin, donde su figura trasciende lo estrictamente militar para convertirse en parte del folclore local.
El teniente Bedacarratz, pampeano de cepa, nacido y criado en Macachin. Cada vez que salía hacer prácticas, creo que de la Base de Villa Reinolds, hacia una pasada muy sonora por su pueblo, y los macachinenses, decían "....tranquilos es el loco Bedacarratz..."
Este relato es una crónica local que enaltece la figura del Augusto Bedacarratz, un hombre de raíces profundamente pampeanas. La anécdota también refleja el cariño y la identidad popular que se forjaron en torno a su figura. El calificativo "loco" se utiliza de forma coloquial para destacar su carácter excéntrico o particular, sugiriendo al mismo tiempo admiración por su valentía, audacia y entrega en sus funciones militares.
Malvinas 1982: El misil Exocet hunde el Sheffield
El Capitán de Corbeta Augusto Bedacarratz, piloto de la Armada, fue convocado a Malvinas para pilotear nada menos que los recién comprados Super Étendard, aviones franceses con tecnología de punta, y con los misiles Exocet. Y fue la primera vez que un piloto aeronaval lanzará desde ese avión el misil legendario, hoy.
La Argentina sólo 4 meses antes había recibido los aviones y manuales para el uso del misil que cada avión traía en el envío.
El Capitán Bedacarratz, junto a un grupo de marinos de la Armada Argentina, fueron protagonistas del ataque del 4 de mayo, del que se cumplen 43 años: Un misión en soledad, con recarga de combustible en vuelo de los dos aviones conectados al avión cisterna Hércules KC-130 de la Fuerza Aérea que los esperó realizando círculos en un punto exacto para la difícil tarea, y un avión explorador, el P2 Neptune, tripulado por 11 hombres que, con equipo casi obsoleto, pudo detectar e indicar la marca del blanco a los aviadores de los Súper Etendard, además de identificar con su equipamiento de contramedidas electrónicas los radares de los buques ingleses.
Augusto Berrocarratz y su numeral el Teniente de Fragata Armando Mayora, en el otro avión de apoyo, volaban a 15 minutos del blanco, cuando el P2 Neptune, arriesgándolo todo, envió directamente la última posición. Sólo 5 segundos duró el envío, detectado por la Task Force inglesa, que ni se lo imaginaron.
La electrónica y complejidad utilizada en tantas horas de prueba se ajustaron al blanco. Los Super Étendard enfrentaban tiempo malo con lloviznas, niebla, visibilidad menor a media milla (920 metros aproximadamente) y un techo de vuelo de 500 pies (150 metros aproximadamente).
A menos de 40 millas del blanco encendieron los radares para confirmar el blanco. El HMS Glasgow detectó los aviones argentinos dando el primer aviso de ataque. A menos de 10 millas los misiles habían sido lanzados. El Sheffield, un destructor de última generación recibió el impacto produciendo un incendio masivo que a los pocos días lo mandó a pique.
En Macachin por esos días, ni se imaginaban el acto de coraje de su hijo dilecto. Que recibió la Medalla de la Nación Argentina al Valor en Combate. Hoy tiene 75 años. Aún recuerdan la anécdota de sus vuelos rasantes, ya parte del folclore local, que muestra cómo la memoria colectiva se impregnó de la imagen de un aviador que dejó una marca imborrable de heroísmo en su pueblo. Y en los argentinos.
Capitán de Corbeta Armando Mayora y Capitán de Fragata Augusto Bedacarratz
"…tranquilos, es el loco Bedacarratz"